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La palabra fotografía viene del griego: photo (luz) + grafia (grabar, escribir, pintar…), por lo que etimológicamente fotografía significa “pintar con la luz”.

Esta definición nos lleva a afirmar que la luz es el elemento esencial para obtener una imagen perdurable e inalterable en un soporte material, ya sea papel, o cualquier otro elemento sensible.

Desde su descubrimiento hace casi dos siglos, la fotografía se ha desarrollado a través de otras ciencias complementarias, como han sido la química, la física, la óptica, la geometría, la ingeniería, además de los conocimientos que los grandes pintores nos han ido dejando, relativos al encuadre, la perspectiva, la profundidad de campo, la teoría del color… y muchas otras disciplinas relacionadas con distintas modalidades del arte.

Así, el aprendizaje de la fotografía ha comportado una obligada preparación mínimamente técnica (y alternativamente artística), para conseguir siquiera una imagen legible a nuestros ojos y a nuestra comprensión mental, y subsiguientemente atractiva desde el punto de vista de la composición y de su capacidad expresiva. Particularmente, yo estudié a lo largo de 3 años el curso AFHA, complementados con una obligada secuencia de continuas prácticas para la obtención de la correspondiente acreditación oficial.

Hoy, en esta transición entre dos milenios, asistimos a una nueva revolución tecnológica, como es la Era Digital, que incide en nuestra vida cotidiana, y  en –prácticamente todos– los sectores profesionales. Uno de ellos es la fotografía.

La aplicación de algunos de estos nuevos parámetros electrónicos e informáticos, han supuesto una inmediata estandarización de la práctica fotográfica, al facilitar la obtención de imágenes con una asombrosa fidelidad de la realidad frente a nuestros ojos. Pero este resultado es lo que podemos entender como una mera “fotocopia”.

En muchos casos, la “fotocopia” es suficientemente descriptiva para mostrar un producto, un rostro o un paisaje, pero no la versión más atractiva de ese objeto, persona o panorama, que llegue a estimular nuestra sensibilidad. Estamos hablando de la foto-grafía “profesional”, de cuya ejecución ofrezco aquí una breve muestra que nos explica visualmente el coeficiente de trabajo y dificultad técnica: